Si te has lesionado puede ser tentador quedarte en casa y esperar a que se cure y a recuperarte. Sin embargo, el reposo absoluto no siempre es la mejor opción para una recuperación completa y efectiva. De hecho, mantenerse activo y entrenar puede acelerar el proceso de curación y prevenir futuras lesiones.
El cuerpo humano es un sistema complejo que se adapta constantemente a los estímulos. Cuando te lesiones, tu cuerpo comienza a adaptarse a la nueva situación, lo que puede resultar en una disminución del tono muscular, la flexibilidad y la resistencia cardiovascular.
Al entrenar de manera segura y efectiva, puedes ayudar a tu cuerpo a adaptarse a la lesión y prevenir una mayor pérdida de fuerza y condición física. El entrenamiento también puede ayudar a mejorar la circulación sanguínea y linfática, lo que puede acelerar el proceso de curación.
Además, el entrenamiento puede ayudar a prevenir futuras lesiones fortaleciendo los músculos y aumentando la flexibilidad y la movilidad. Al fortalecer los músculos que rodean las articulaciones afectadas, puedes reducir el riesgo de lesiones recurrentes.
Cuando tenemos una extremidad lesionada o inmovilizada es útil entrenar la extremidad sana. Está demostrado que entrenar la extremidad sana produce menor pérdida de fuerza que si no se entrena, recortando los tiempos de recuperación.
Las adaptaciones están provocadas por el sistema nervioso central (SNC). Este proceso se llama educación cruzada.
Es importante trabajar con un entrenador personal experimentado que pueda crear un programa de entrenamiento seguro y efectivo para ti. El entrenador personal puede ayudarte a adaptar el entrenamiento a tu lesión específica y trabajar con el equipo médico para asegurarse de que no estás haciendo nada que pueda retrasar la curación.
El entrenamiento con lesiones debe ser gradual y progresivo. Comienza con ejercicios de bajo impacto y baja intensidad, y aumenta la intensidad y la duración gradualmente a medida que tu cuerpo se adapta y se fortalece.
Es importante escuchar a tu cuerpo y detener el entrenamiento si sientes dolor o molestias. También es importante mantener una buena comunicación con tu equipo médico para asegurarte de que estás haciendo todo lo posible para recuperarte de manera segura.
Si tienes una lesión y quieres recuperarte de manera segura y efectiva, contáctame hoy para programar una sesión de entrenamiento personalizada. Con mi experiencia y conocimientos, puedo ayudarte a diseñar un programa de entrenamiento seguro y efectivo para acelerar tu recuperación y prevenir futuras lesiones. ¡No esperes más para recuperar tu fuerza y movilidad!
Si tienes una lesión y el médico te lo permite, ¡ENTRENA!